Al proceso de unir todas las señales que entran a la consola por cada canal se le llama mezclar. Primero, las señales son procesadas en cada canal por medio de la ecualización y la aplicación de procesadores de audio digital como los son los compresores, retardos “delay”, puertas “gate”, etc.
Segundo, podemos asignarle la señal de cada canal a una salida de la consola, pues en cada canal encontraremos; un volumen para la mezcla principal, uno para la mezcla de monitores “Auxiliares” o para la mezcla de radio, TV. etc. Esta salida puede ser por el “Master L/R”, matrices, sub-grupos o auxiliares.
Cuando le asignemos la salida en donde queremos escuchar la señal de audio, entonces subiremos el volumen de cada canal al nivel deseado. Con esto, debemos de estar escuchando la señal por la salida asignada.
Importante. Debes de tener subido el volumen de la salida.
Los niveles de volumen juegan un papel sumamente importante ya que esto reflejará el producto final que llegará a los oyentes. Pero ¿Qué pasará si el sonidista no tiene buen oído o no conoce el registro de las voces e instrumentos? ¿Qué pasará si no tiene el conocimiento para manejar el equipo? Pues diré, que no será el mejor sonido que vayamos a escuchar.
El oído es el instrumento principal que tiene el sonidista. Si no tiene una buena percepción de los sonido, del conocimiento de los diferentes instrumentos y voces, su cualidad acústica como lo son el registro, timbre, tono y duración; el resultado de la mezcla será pobre y deficiente.
En algunos casos la perdida de audición provoca que no se escuchen los niveles de volumen correctamente ni la definición de los sonido provenientes de la tarima. También no se podrá hacer un buen balance entre la voz principal que lleva la melodía, los instrumentos que hacen la base y los que hacen los efectos.
Encontramos muchos casos por ejemplo, que hay una cantante llevando la voz principal y 5 voces más haciendo las armonías, en donde los micrófonos de las armonías están al mismo nivel de la voz principal o sobrepasan la voz principal, provocando una saturación en la mezcla con altos niveles de volumen que muchas veces provoca que se pierda la esencia de la canción. Mucho de estos problemas surgen por la falta de conocimiento y entrenamiento adecuado. Hay que conocer los equipos, pero también hay que entrenar el oido para lograr una buena mezcla. Esto se logra escuchando correctamente.
He aquí unos consejos:
- Cuando escuches música, no lo hagas a un volumen excesivo, pues perderás audición con el tiempo.
- En la canción o tema musical que estes escuchando, identifica quien lleva la melodía. Puede ser un cantante o un instrumento musical e identifica quien lleva la base o el acompañamiento de la voz principal.
- Por lo general la batería y el bajo llevan la base rítmica y la guitarra y teclados la base armónica. Esto en los casos en que la guitarra o el piano no llevan la melodía.
- Aprende a identificar los instrumentos por su registro, grave, medio o agudo.
- Añadir mucha ecualización a la señal puede causar:
- distorsión en el sonido
- que el instrumento suene incorrectamente
- retroalimentación de frecuencias y muchos problemas más.
Más ecualización no quiere decir que es mejor. La señal recibida en la consola debe de escucharse lo más parecido a como fue generada.
La mezcla final es responsabilidad del sonidista.